Rack de Almacenamiento Vertical para Mancuernas Hexagonales 10 pares IRONSIDE

En espacios donde cada metro cuenta, este rack vertical para 10 pares de mancuernas (1 a 10 kg) ordena el área de fuerza sin sacrificar accesibilidad ni seguridad. Con huella compacta de 78 × 48 × 145 cm y estructura de acero perfil 40 × 80 × 1,5 mm, ofrece una base aplomada para circulación fluida entre estaciones, acelerando la rotación de usuarios en horas pico. La bandeja de acero de 2,75 mm sostiene el kilaje con rigidez constante, evitando torsiones que suelen aparecer en racks livianos y extendiendo la vida útil del equipamiento.

Pensado para salas con alta rotación y home gyms exigentes, admite hasta 200 kg de carga total sin perder estabilidad. El diseño escalonado deja cada par a la altura justa para agarrar y devolver sin desalinear la muñeca, lo que reduce golpes contra la estructura y minimiza el desgaste de las gomas. En la práctica, organizás por rangos (1–4 kg, 5–8 kg, 9–10 kg) y resolvés cambios de peso en segundos, con una lectura rápida que agiliza series en superseries, EMOM o progresiones clásicas de fuerza.

CAPACIDAD Y FLUJO DE USO

Cuando el objetivo es mantener ritmo de trabajo, la disposición vertical con 10 posiciones definidas permite que varios usuarios roten sin trabarse en la misma línea de carga. Cada cuna guía el apoyo del hexágono y evita rodaduras, así que las mancuernas quedan siempre estables y listas para el siguiente bloque. Esto se traduce en transiciones más cortas y en sesiones con mayor tiempo efectivo bajo tensión, clave en rutinas orientadas a hipertrofia o acondicionamiento.

Para programaciones con bloques por tiempo, la lectura visual del set completo (1 a 10 kg) simplifica la toma de decisiones del coach y del usuario. La estructura compacta libera pasillos y zonas de paso, logrando estaciones más despejadas y menos cruces en sala. A nivel operativo, reducís micro-pausas y pérdidas de foco, algo que impacta directo en la calidad del estímulo y en la percepción de servicio.

ESTRUCTURA, ESTABILIDAD Y DURABILIDAD

La columna principal en acero 40 × 80 × 1,5 mm combinada con bandeja/placa de 2,75 mm entrega una rigidez que se nota cuando el rack está completo. No hay flexiones ni cabeceos al cargar o descargar, y la sensación de solidez se mantiene aun con uso intensivo. El diseño favorece una transmisión de cargas limpia hacia el piso, evitando vibraciones que aflojen herrajes con el tiempo.

La pintura horneada y los apoyos de contacto reducen la abrasión, de modo que el acabado se conserva profesional pese al uso diario. Para boxes y gimnasios donde el equipamiento rota todo el día, la combinación de espesores y geometría sostiene la integridad del rack por más tiempo y protege la inversión en mancuernas, que dejan de golpear bordes o apoyarse en ángulos que marcan la goma.

ERGONOMÍA Y SEGURIDAD DEL CONJUNTO

Las cunas guían el apoyo del hexágono y dejan un espacio útil para meter la mano sin pellizcar dedos ni forzar muñeca. Así, levantás y devolvés el par con trayectorias naturales, sin “quiebres” raros que corten el ritmo de la serie. La altura total de 145 cm mantiene la parte superior del rack dentro del campo visual, por lo que el usuario no necesita subirse a nada para acceder a los pesos más altos.

Sumado a eso, la base de 78 × 48 cm estabiliza el conjunto sin invadir pasillos. En suelos de goma o cemento alisado, la huella corta reduce tropiezos y choques durante los cambios de estación. El resultado es un flujo más seguro y predecible, con menos interferencias en programaciones grupales y sesiones personalizadas donde el tiempo entre ejercicios vale oro.

INSTALACIÓN, LOGÍSTICA Y MANTENIMIENTO

El rack llega en embalaje doble (79 × 50 × 9 cm y 145 × 42 × 13 cm), lo cual facilita ingresos por pasillos y ascensores en obras o edificios. El montaje es directo y mantiene tolerancias firmes para que no aparezcan crujidos a las pocas semanas. Con 27,5 kg de peso neto (30,5 kg bruto), se reubica sin drama si cambiás el layout de sala o si necesitás acercarlo a un muro para liberar zona central.

El mantenimiento es mínimo: limpieza de rutina y chequeo periódico de fijaciones alcanzan para conservar la rigidez estructural. Al organizar por rangos, disminuís el golpeo entre mancuernas y evitás que queden apoyadas en suelos sucios o húmedos, lo que prolonga la vida del recubrimiento y mantiene la estética de la sala. En resumen, ordenás, protegés y acelerás la dinámica diaria sin sumar complejidad.